Es la reacción dolorosa de los dientes cuando se toman bebidas muy calientes o frías o alimentos muy dulces o ácidos.
Los dientes sensibles o “destemplados” son una molestia común entre los 20 y 40 años, aunque pueden sufrirse desde los 15 hasta los 70 años, cualquiera de los dientes puede volverse sensible o “destemplarse”. No obstante, es más frecuente que se afecten los que están cerca de los “colmillos” o caninos.
El desgaste o destrucción del esmalte, la capa dura de los dientes, o la retracción de las encías permiten un mayor contacto de los alimentos fríos, calientes, dulces o ácidos con los nervios de los dientes y provocar así la reacción dolorosa.
El desgaste o destrucción del esmalte puede estar relacionado con:
La retracción de las encías puede ser resultado de:
Otras causas de dientes sensibles o “destemplados” es:
Es recomendable que consulte a su dentista, quién puede también: